Algunas
personas piensan que tengo algún tipo de prejuicio en contra del cine mexicano,
lo cual no creo que sea cierto, pero si de verdad tuviese tal comportamiento y
me preguntasen el motivo, la respuesta sería bastante simple: Porque 4 de cada
5 películas mexicanas son basura ¿Adivinen en qué lado del ese porcentaje cae
este film?
Pánico 5 Bravo nos cuenta la historia de un grupo
de paramédicos en una ciudad fronteriza de los Estados Unidos que, tras recibir
una llamada de auxilio, deciden cruzar la frontera hacia México para ayudar a
un joven con una herida de bala. Lo que no saben es que el herido es buscado
por un cartel de narcotraficantes, lo que pondrá en riesgo la vida de todos los
que se encuentran dentro de la ambulancia.
Tengo que
admitir que la premisa suena interesante… y eso es lo único que puedo decir a
favor de esta película. La idea puede resultar buena, pero la ejecución de la
misma es torpe, apresurada y peor que todo, aburrida. La cinta está más
interesada en presentarnos “giros inesperados” que en contar una historia
coherente. Por ejemplo, si de pronto yo confesar que en realidad soy una cabra
extraterrestre que vino a este planeta para robar todo el helado de chocolate
en el mundo, eso resultaría completamente estúpido y sin sentido, pero es algo
que nadie se esperaría por lo que automáticamente lo hace un buen giro ¿O no?
No. No lo hace. Esta película cree lo opuesto.
El gran
problema (uno de tantos) es que la película no se toma el tiempo para presentarnos
a sus personajes. En lo que al espectador refiere, lo que le ocurre a los “personajes”
les está ocurriendo a completos desconocidos, por lo que no tienen verdadero
impacto ya que no existe ningún tipo de conexión entre espectador y los
personajes. El hecho de que dos de los paramédicos se presenten en situaciones
tan clichés como “Estoy a pocos días de jubilarme” y “Tengo algo importante que
decirle a mi amada pero lo hare cuando regrese de mi turno en el trabajo” no
ayuda en lo más mínimo, en ese momento bien pudieron haberse puesto una
camiseta que diga “Moriré en el transcurso de esta película” y eso hubiese sido
igual de sutil y hasta más original.
En más de
una escena la película trata de ser perturbadora e impactante, pero son
filmadas de forma tan ridícula e incompetente que lo único que provocan es
risa, y me gustaría estar bromeando sobre eso pero fue verdad, por lo menos en
dos ocasiones me tuvieron que callar por las fuertes carcajadas que se me
escaparon durante esas escenas supuestamente perturbadoras. No sé si la culpa
por esta mala película recaiga en el guionista, el director o el protagonista… Es
broma, lo sé perfectamente porque esos tres títulos son la misma persona: Kuno
Becker. El hecho de que pueda (o mejor dicho, piense que pueda) hacer tres
cosas a la vez, no significa que debería hacerlo.
A final de cuentas
Pánico 5 Bravo es una completa pérdida
de tiempo que solo podría recomendar (y uso la palabra “recomendar” muy, muy vagamente)
a fans de Kuno Becker (si es que tal cosa existe) o a personas con fuertes
prejuicios xenofóbicos, sin importar de qué lado de la frontera se encuentren.
Por cierto Kuno Becker, el citar a Albert Einstein sin ton ni son, no te hace
más inteligente, te hace ver patético al querer fingir que eres más profundo e intelectual
de lo que verdaderamente eres.
Pánico 5
Bravo: 4/10
Mejor que:
Cambio de Ruta (2014) (que aun con porquerías como Pánico 5 Bravo, no se salva de ser la peor película que he visto en
lo que va del año)
No tan buena
como: Cualquier otra cosa, casi literalmente.