Existe la noción
de que un llamado “fanboy” es completamente ciego a cualquier tipo de crítica
que se haga al objeto, concepto y/o persona que se gana su devoción. Muchas
veces me han dicho que soy un “fanboy” ciego de Marvel, más específicamente de
su llamado Universo Cinematográfico y no me avergüenza aceptar que lo soy, pero
aun bajo estas circunstancias me es imposible nombrar La Era de Ultron como la mejor película que he visto en el año, por
mucho que mi ñoño exterior (es decir, todo mi yo) quiera hacerlo.
Los Vengadores: La Era de Ultron continua con la historia de los “héroes
más grande de la tierra” y sus aventuras tratando de atar cabos sueltos desde
su última aventura en conjunto. Es bajo estas circunstancias que Tony
Stark/Iron Man (Robert Downey Jr.) junto con Bruce Banner/Hulk (Mark Ruffalo) planean crear algo para ayudar
a Los Vengadores en su tarea de proteger el planeta, y ese algo es la
inteligencia artificial Skynet Ultron, desafortunadamente el que fue
diseñado para ser el más grande aliado de Los Vengadores se convierte en uno de
sus enemigos más poderosos cuando Ultron llega a la conclusión de que la única manera
de proteger al planeta Tierra es con la extinción de la raza humana.
Hasta el
momento Marvel se ha dado a la tarea de ser cuidadoso a la hora de crear y expandir
su universo fílmico, dando gusto tanto a propios como extraños que siguen las andanzas
de sus personajes, algo que hasta el momento han logrado hacer de manera más
que competente, sin embargo La Era de
Ultron es la primera vez que siento que un producto de Marvel podría ser demasiado
abrumador para aquellos que no están tan familiarizados con el material
original o incluso los que no están tan inmersos en la versión cinematográfica del
mismo. Es cierto que la película nos da todos los elementos necesarios para
entender la trama, que no es lo que podría llamarse compleja, el problema es
que algunos de sus elementos se van presentando excesivamente rápido y algunos
de ellos se hacen a un lado casi instantáneamente. Por primera vez se siente
como si Marvel tuviese demasiado en su plato, algo que es muy sorprendente que
haya ocurrido apenas en este momento si tomamos en cuenta que tenemos 11 películas
previas (y eso si dejamos de lado las producciones de televisión).
La primera película
de Los Vengadores logro evadir varias
trampas que esta secuela no pudo evitar. El reparto es tan grande (y amenaza
con crecer aun más) que la aparición de muchos personajes no son más que cameos
glorificados, sin embargo la interacción entre todos los involucrados, por
mayor o menor que sean, se sienten naturales y logran enriquecer tanto a los
personajes como al mundo que habitan. Hay muchos cambios en cuanto a personajes
(sobre todo en los nuevos) que tal vez hagan que los más puristas se rasguen las
vestiduras, pero todos estos cambios resultan comprensibles y en muchos casos
necesarios para hacer el concepto mucho más fácil de digerir, con dos excepciones
que no me atrevo a mencionar para evitar spoilers.
Es cierto
que La Era de Ultron nos presenta
muchas cosas nuevas pero hay otras tantas que empiezan a sentirse repetitivas
en el mundo Marvel, como si se estuviera tratando de alcanzar una lista de
objetivos, sobre todo al compararla con la primera de Los Vengadores (Spoilers muy mínimos adelante, pero spoilers a fin
de cuentas): ¿Control mental que obliga a varios compañeros de equipo a pelear
entre ellos? Listo. ¿Gran batalla final contra un ejército invasor? Claro que
sí ¿Carrera contra el tiempo para detener un “algo” aéreo que amenaza con matar
a millones? No lo duden ¿Villano carismático (aunque no tanto como Loki)? No
era para menos. El “problema” (si quieren llamarlo así) con La Era de Ultron es que la llamada “Fase
2” de Marvel no se dedico a llegar a este film, por lo menos no específicamente
si la comparamos con la “Fase 1” cuyo objetivo desde un principio fue poner
poco a poco todas las piezas sobre el tablero para culminar con la primera
cinta de Los Vengadores, lo cual
tiene sentido si, como creo, pensamos que Marvel apunta aun más lejos desde ese
entonces: Al gran desenlace que será Los
Vengadores 3.
La Era de Ultron no es un mal paso ni mucho menos un
descalabro en el sólido universo Marvel (para eso tenemos Iron Man 2), pero puede que resulte demasiado cansada para aquellos
que no son fans de los comics. Aun con todo esto La Era de Ultron sigue siendo una de las películas más entretenidas
del año (solo una, no LA mejor) que bien vale la pena disfrutar en el cine y si
son como yo, probablemente más de una vez. Un consejo antes de terminar (uno
que estoy casi seguro que muchos van a ignorar): solo existe una escena extra a
la mitad de los créditos, por lo que si esperan hasta el final de “las letritas”
se llevaran una decepción cuando descubran que lo único que les espera es una leyenda
que anuncia que “Los Vengadores volverán”.
Los
Vengadores: La Era de Ultron: 3/5. Buena.
Mejor que: Iron
Man 2 (2010) Iron Man 3 (2013), Thor: Un Mundo Oscuro (2013)
No tan buena
como: Los Vengadores (2012), El Capitán América y El Soldado del Invierno
(2014), Los Guardianes de la Galaxia (2014).